sábado, 4 de abril de 2009

Suerte de principiante y buenos amigos en Barcelona



¿Qué pinto yo escribiendo un libro de relatos de amor? ¿Y que pinta Raúl Argemí presentándolo y hablando además bien de los cuentos que lo componen? Los dos últimos argentinos duros trasplantados y hablando de esas cosas... Igual es que somos unos románticos y lo disimulamos. Pero OJO: mariconadas, las justas. Ahora, en serio, muchas, muchas gracias a Raúl Argemí por presentar el miércoles pasado en la FNAC de Triangle mi libro "Yo también puedo escribir una jodida historia de amor", editado por Escalera. Barcelona no es una plaza fácil, porque tiene tanta producción propia, tanto en catalán como en español, que todo esfuerzo es poco y merece la pena. Y allí estuvo Argemí, diciendo sobre mis cuentos cosas tan bonitas que las grabé para volver a escucharlas en los momentos de bájón, que los hay.



Y por si fuera poco con el presentador, también estuvo dando su apoyo la escritora y periodista Cristina Fallarás, que acaba de volver al ruedo de la novela con la excelente "Así murió el poeta Guadalupe" (Alianza), un libro que dará que hablar dentro y fuera del género. Yo lo llevo por la mitad y sigo maravillado e impaciente por terminarlo, así que este post será breve.
Entre el público, además de Talía Casado y Daniel Ortíz, los dos pulmones de Ediciones Escalera, estaba Pepa, la hija de Fallarás y Argemí. Cuatro meses, dos ojos para comerse el mundo y un silencio durante el acto que hace pensar que esta nena tiene nervios de acero, además de mofletes de caramelo.



Y como mi suerte de principiante ya dura dos años,hay que aprovecharla antes de que se acabe. A Paco Camarasa, capitán junto a Montse de la Librería Negra y Criminal en la Barceloneta, no le costó nada convencerme para que cambiara para la noche mi bus de regreso a Madrid (ocho horas que alcanzan para idear cualquier crimen de novela o reunir ganas de cometer uno de verdad), y así pude asistir el viernes a mediodía al homenaje que ofrecieron a Méndez con motivo de la aparición de "No hay que morir dos veces", la más reciente aventura del policia peor alimentado de España, que acaba de publicar Francisco González Ledesma.
Así pude, además de celebrar los 25 años (en realidad, serían 26, pero es lógico que Méndez se quite edad),compartir mejillones y otras delicias con el propio autor, Andreu Martín y varios periodistas que habían acudido a la rueda de prensa previa. La "tarta", como no podía ser de otra manera, tratándose del personaje en cuestión, fue un bocata de chorizo con velitas y todo.
Por suerte, los fotógrafos se marcharon antes de ver cómo Argemí y yo nos apropiábamos de la olla de mejillones "a la Méndez" que los dueños de casa habían preparado. Siempre soñé que esto de la literatura llegaría a darme de comer y mira por donde, se hace realidad...
GRACIAS, A TODOS y amenazo con volver pronto, cuando se presente en mayo PERO SIGO SIENDO EL REY, mi tercera novela.

1 comentario:

Fallarás dijo...

A mandar, compañero. Ya sabe dónde tiene casa.